Como parte del antiguo sistema medicinal chino, el cual tiene más de 5.000 años de antigüedad, este tipo de fitoterapia se basa en la utilización de plantas medicinales y de hierbas para tratar a la persona como un todo, cuidando tanto la salud física, como la mental y emocional.
Mientras que en Occidente las plantas se administran en función de su composición química (principios activos), en la Medicina Tradicional China las plantas se caracterizan según diversas características energéticas: naturaleza, sabor, dirección en la que mueven la qi (energía del cuerpo), afinidad por órganos o meridianos.
Pero, además de una elevada proporción de plantas, la fitoterapia china emplea también sustancias de origen animal y mineral, por lo que sería más correcto denominarla farmacopea china.
Plantas Yin y Yang
Según sus características energéticas y físico-químicas, una planta o materia puede provocar calor en el organismo –es decir, aumentar el yang- o enfriamiento –aumentar el ying-.
A su vez, las plantas y los medicamentos chinos se han clasificado en 4 naturalezas: frío, fresco, templado y caliente. Las dos primeras naturalezas son características yin, mientras que el templado-caliente son yang.
Por estas características, la Medicina China emplea materias frías o frescas para tratar enfermedades que cursen con síntomas yang (fiebre, sed, estreñimiento, cefalea, agitación, etc), y materias tibias o calientes para enfermedades con síntomas yin (frío, orina clara y abundante, dolores articulares, etc).
Un sabor para cada órgano
Además de la naturaleza energética, cada materia posee uno o varios sabores. Estos cinco sabores –ácido, amargo, dulce, picante y salado- se relacionan con cada uno de los cinco elementos: madera, fuego, tierra, metal y agua.
Según la teoría de los 5 elementos, pilar fundamental de la Medicina Tradicional China, cada uno de estos elementos está relacionado con los órganos yin y los órganos yang del organismo.
¿Cómo actúan en el organismo?
El sabor de cada materia, además de poseer determinada afinidad por un determinado órgano, tiene también otros efectos sobre el qi (energía del cuerpo), los líquidos orgánicos, la sangre y los órganos.
Plantas con sabor ácido
Órganos afines: Hígado y vesícula biliar.
Acción Terapéutica: Contraen, restringen e introducen la energía del cuerpo hacía adentro. Por eso, suelen emplearse cuando hay escapes de energía (qi) o de fluidos del cuerpo.
Las más indicadas: Las bayas de la planta Schisandra chinensis, de sabor ácido y naturaleza tibia, se emplean en fórmulas para casos de sudoración profunda, diarreas, excesivas diuresis, tos crónica, etc..
Plantas de sabor amargo
Órganos afines: Corazón, intestino delgado y pericardio.
Acción Terapéutica: Provocan un descenso del qi, y así ayudar a drenar o expulsar factores patógenos, como el calor, la humedad o el calor tóxico.
Las más indicadas: * Los rizonas de ruibarbo (Rheum officinale), de sabor amargo y naturaleza fría, se emplean para tratar el estreñimiento.
* Existe una variedad de diente de león que ayuda a eliminar el calor tóxico y humedad en hígado, estómago, pulmón e intestino.
Plantas de sabor dulce
Órganos afines: Bazo, estómago y páncreas.
Acción Terapéutica: Tonifican y aumentan el qi y, al mismo tiempo, hidratan el organismo. Se emplean sobre todo para tratar problemas derivados de insuficiencias de energía: cansancio, debilidad, fatiga crónica, etc..
Las más indicadas: *Las raíces de Huang qi (Astrangalus membranaceus) se incluyen en muchas fórmulas tonificantes para tratar la fatiga.
*El ginseng (Panax Ginseng) es otra planta tonificante por excelencia.
Plantas de sabor picante
Órganos afines: Pulmón e intestino grueso.
Acción Terapéutica: Mueven y exteriorizan el qi y los fluidos, por eso, se emplean en patologías producidas por estancamiento del flujo de energía y sangre (que se manifiesta con distensión o dolor) o para expulsar los factores patógenos (gripes o resfríos).
Las más efectivas: La efedra (Ephedra sinica) o la casia (Cinamomum cassia) se emplean para tratar resfríos, ya que por su sabor picante favorecen la sudoración, y por su naturaleza tibia calientan el organismo y le ayudan a eliminar el frío.
Plantas de sabor salado
Órganos afines: Riñón y vejiga.
Acción Terapéutica: Son emolientes, laxantes y a veces sedantes, pudiéndose emplear, por ejemplo, para reblandecer nódulos.
Las más efectivas: La materia Ostrea gigas (el polvo del caparazón de las ostras), de sabor salado y naturaleza fresca, se emplea para tratar la irritabilidad, la hipertensión, el insomnio y los ganglios linfáticos enquistados.
¿Cómo tomarlas?
- La forma tradicional de tomar las prescripciones es mediante una decocción muy larga, realizada de la siguiente manera:
- Verter las plantas en un recipiente, cubrir con agua y dejar que hierva a fuego lento entre 20 y 30 minutos. El agua deberá reducirse más o menos a la mitad.
- Pasado ese tiempo, colar apartando el líquido obtenido.
- Volver a agregar agua a las mismas plantas y hacer una segunda decocción por 20-30 minutos más.
- Mezclar el producto de la primera decocción con ésta última, de modo que queden 2 ó 3 vasos llenos.
- Tomar en 2 ó 3 tomas diarias.
Nota: Para la Medicina Tradicional China, la decocción es el método más eficaz, ya que algunas materias, como los minerales, requieren hervir más tiempo que las raíces o flores, que precisan entre 15-20 y 10 minutos, respectivamente.
- También existen otras posibilidades más cómodas de administrar la fitoterapia china: píldoras, polvos, infusiones y extracto líquido (en forma de gotas). Y, por vía tópica: aceites, cremas, emplastes, etc.
Fórmulas hechas a medida: En la fitoterapia china una composición herbal es un mecanismo que se adapta perfectamente al cuadro patológico del paciente. Puede estar compuesta de una (prescripción simple) o 20 plantas, aunque generalmente contienen entre 5 y 8 ingredientes.
La entrada Fitoterapia China: Plantas que liberan la energía corporal aparece primero en Revista Salud Alternativa.